Degradación de la educación
El pensamiento de Günther Anders, en la La obsolescencia del hombre (1956), profundiza en la crítica a la modernidad y la relación del ser humano con la tecnología. En este contexto, Anders plantea una serie de ideas sobre el control social y la manipulación que resulta de los avances tecnológicos y del condicionamiento cultural, advirtiendo sobre el peligro de que la humanidad quede obsoleta ante su propia creación. En primer lugar, Anders afirma que para evitar revueltas, no es necesario recurrir a la violencia, como lo hacía el régimen de Hitler. En cambio, plantea que el camino más efectivo es el condicionamiento colectivo, que empieza con la degradación de la educación. La reducción deliberada de la calidad educativa tiene el objetivo de limitar los horizontes de pensamiento de los individuos. Cuando el pensamiento humano se concentra en cuestiones triviales y materiales, disminuye su capacidad crítica, lo que facilita el control social. Anders, sostiene que, en un sistema así,